El comienzo del final -Preludio a la luna de sangre-

(Este tema es el preludio a la gran batalla que ocurrira en las Areas Verdes al terminarse este tema; el que quiera leer que es lo que pasara, porque pasara y como sientase libre de leerlo y comentar, solo sera un post de mi parte y ya que pondre cuando lo termine)

La ruinas se agitaban lentamente con el lento caminar de todos los seres; hacia la antigua catedral en ruinas marchaban hordas y hordas de esqueletos, abominaciones, sombras y nigromantes cargando bolsas con huesos y botellas de sangre; tambien vampiros, vestidos con largas capas negras, algunos demonios y muchas mas criaturas se acercaban hacia alli, relamiendo sus colmillos y moviendo sus garras.Dentro de las ruinas, aun mas criaturas se agitaban alli, increiblemente organizadas en filas, todas mirando hacia el pedestal y estatua del centro, que se elevaba hasta el desvencijado techo.Todos parecian aguardar algo, mirando hacia una pequeña grieta del techo por donde se colaba la luz de la luna, cada vez mas debil.

La estatua del antiguo mago Campbell...tan reverenciado en aquellos tiempos como el mejor mago del mundo miraba hacia abajo con un rostro de pena y tristeza, como si anticipara los hechos que vendrian pronto y no pudiera hacer nada para evitarlo.Lentamente las criaturas dejaron de entrar; las que no cabian en el suelo se colgaban de las paredes o el techo donde se podia, y otras incluso levitaban o se mantenian en el aire gracias a sus membranosas alas...todas las criaturas oscuras de los libros estaban alli, deseosas de que aquel que las habia convocado llegara.

De repente, todo empezo a vibrar, como si un terremoto sacudiera la tierra; la luz de la luna desaparecio y el techo se destrozo completamente, mientras por la abertura entraba volando un enorme dragon negro, sus ojos verdes centellando con fuerza y sus alas con garras batiendo fuertemente; incluso ante eso, ninguna de las criaturas se inmuto.El dragon aterrizo sobre la estatua de Campbell y se aferro a ella con las garras de sus poderosas patas, haciendo que la piedra crujiera y se resquebrajara un poco; de su lomo, saltaron dos figuras hacia el pedestal frente a la estatua.Una de ellas vestia un sobretodo negro con el pecho al descubierto, donde brillaba debilmente un cristal multicolor, la otra vestia tambien un sobretodo negro, pero usaba unas grandes hombreras hechas de acero y con picos saliendo de ellas; en su mano derecha llevaba una larga lanza negra, cuya punta de diamante estaba completamente envuelta en una enfermiza luz roja brillante, en su mano izquierda llevaba un libro de cuero negro con runas en su cubierta.Ante la vision de esta figura, las criaturas comenzaron a rugir y vitorear con animo, pero de un gesto fueron silenciadas.La figura se acerco y con poderosa voz comenzo a hablar.

- ¡Al fin ha llegado el dia! - grito sonriendo levemente - han pasado ya 140 años desde que el gran mago Campbell purgo las laderas de la montaña oscura de Radium y construyo alli su Academia...¡robandoles a ustedes su lugar profano! - a su exclamacion siguio un grito de todos los seres presentes - pero ahora las cosas han cambiado...¡el linaje de Campbell se ha debilitado! La Academia ya carece de sus protectores de antaño, aislada del mundo, ahora esta a nuestra merced...los he invocado a todos aqui hoy por el poder que nuestro maestro me ha conferido con un solo proposito - dijo señalando a la estatua de Campbell - ¡destruir el sueño de ese mago de una vez! - Radium respondio con un fuerte rugido al igual que las criaturas alli presentes, que se acercaron un poco mas a Boden - esta noche mis guerreros, ¡marcharemos sobre la Academia Radium Alba y recuperaremos nuestra tierra! ¡! ¡Le mostraremos a la Luz que la Oscuridad siempre prevalecera! - las criaturas gritaron aun mas fuerte mientras Radium apretaba aun mas la estatuta, haciendo que al final cayera destruida a las espaldas de Boden y Golem, que se habia unido a su maestro - ¡asalten las puertas de Radium Alba! ¡Marchen al abrigo de la noche y destruyan todo lo que encuentren! ¡SILENCIEN A LA LUZ PARA SIEMPRE! - grito Boden con todas sus fuerzas; una pequeña Banshee de alli se subio al pedestal y comenzo a cantar...



Las criaturas comenzaron a vitorear, a rugir, a gruñir, y de un momento a otro, comenzaron a salir de la catedral hacia la montaña donde estaba la Academia, un perfecto ejercito como el mundo nunca habia visto.Boden y Golem observaban la escena sin moverse, con cierta tristeza en sus rostros.

- Maestro...¿realmente funcionara? - le pregunto el familiar a su maestro
- Ya esta hecho...a partir de ahora, comenzara la pesadilla, y cuando termine... - murmuro Boden mientras trepaba a lomos de Radium - el mundo habra cambiado - alcanzo a decir mientras Golem subia tambien y el dragon se elevaba rapidamente al cielo, listo para comandar las fuerzas que ahora marchaban hacia una guerra profana.

Vi a las fuerzas partir rápidamente para el gran asalto a la Academia mientras estaba dentro de ese gran festejo profano. Una alegría malsana invadía a esos seres y... a mi también.

¿cómo había llegado hasta aquí? ¿por qué nací maduramente como un ser oscuro dominado por las energías del abismo? espero no saberlo... la primer cosa que recuerdo es que desperté en mi recámara con un objeto negro incrustado en mi mano, escurría mucha sangre... y se internó en mi, haciendo que mi sangre pasara de rojo a blanco en un instante... irónico ya que me convertí en un ser oscuro. Debí de ser otro antes, pero fuera quien fuera ahora ya no lo recuerdo más... soy diferente, soy una persona que no teme a su pasado, al presente ni al por venir.

Vestía una armadura oscura, con capa de cota de malla... demasiado pesada para una persona normal, pero estas energías me infundían fuerzas para vestirla como ropa de tela. Me dirijo a la batalla al igual que todos, para obtener un territorio que ahora aclamaré como mío para compartirlo con las fuerzas del abismo.

-¡Triunfo o agonía! nos espera lo primero- grité mientras corría en dirección junto con todos aquellos seres, listo para el asalto.

(oh, se me adelanto scott XD, bueno, hagan de cuenta que esta antes de la de scott XD)

Escuche atentamente todo lo que decian... en realidad era un gran plan, ese plan me facino bastante.
-Bueno, bueno, esto es un excelente plan mi señor, pero... como le hara para que no le descubran, o, para no quedar loco por tener que controlar a todos-Bien, he llamado su atención, pero veo que me busca, asi que me acerco a un rayo de luna que se cuela, dejandome ver... traia puesto ese vestido negro que varias veces me ayudo a escapar de las personas que me descubrina -Mi señor, permitame ayudarle con su labor, y contodo lo que usted me pida- le ofresco mi ayuda. Espero que la acepte...

El dragon bajo en picada cerrandoles el paso a la mujer y al chico vestido con esa enorme armadura, agitando la cola suavemente por si querian escapar. Boden desmonto, tomando la lanza del costado donde estaba encastrada; habia cambiado su sobretodo por una armadura ligera negra con lineas rojas, y varias runas que literalmente brillaban suavemente todas grabadas por el pecho, los brazos y las piernas; ya no usaba anteojos sino que usaba una especie de monoculo de cristal negro, que hacia que su ojo derecho pareciera un circulo rojo.Su pelo carmesi ondeaba suavemente en el viento mientras miraba a ambos desde arriba (eran mas bajos que el asi que no podia evitar eso).

- Vaya, esto realmente es una sorpresa - sonrio un poco al ver a Scott...era la primera criatura oscura, ademas de los vampiros, que vestian ropa que no estuviera rasgada o podrida - un caballero de la Muerte y una viuda negra... - se adelanto observando a la mujer, se veia tan fragil, con un movimiento de su lanza podria haberle cortado la garganta...sin embargo, sentia en ella un aura comparable en maldad a la de una sombra, y eso ya era decir mucho - ¿vienen a servir a la causa de nuestro gran dios Loth o se interpondran en mi camino? Hablen sin rodeos o acabare con sus miserables existencias ahora mismo - dijo con voz fria levantando la lanza y dejandola a centimetros del rostro del chico.

-Mi señor, como le he dicho: Yo quiero servirle, ayudarle en todo lo que yo pueda- viendo al joven de que ahora se encontraba a mi lado -La realidad es mi señor, que a el no le conosco, y no le podria decir si quiere servirle como yo, pero en su mirada... se ve la determinacion mi lord.- La mirada de mi señor es de una gran maldad, y su altura no ayudaba mucho, a una persona normal asustaria facilmente, pero yo no soy como cualquiera.
-Solo digame en que quiere que le ayude, incluso utilizaremos a mi sirviente- Ese inutil no me serviria mucho, no tiene lo que se necesita para estar conmigo -Por favor señor, confie en mi-

Definitivamente el grupo donde estaba ahora inmerso era demasiado diverso, sentía la maldad directamente tocando su piel, su nariz sentía el hedor apestoso y putrefacto de algunos de os que estaban allí instalados, no le agradaba tampoco ver a otros tipejos lobunos en el grupo, no hacían mas que recordarles al bastardo que acabo con su familia, pero dentro de su fuero interno sentía que no era mirado como un bicho raro, tal vez solo lo miraban porque su ropa aunque sencilla estaba limpia y en contraste del hedor esta olía a hierba seca. Escucho todo aquel discurso, Realmente destruir la academia parecía algo difícil pero mas importante, algo bastante agresivo de su parte, pero sentía algo diferente, quien sabe, a lo mejor sentía que le había llegado la hora de avanzar y en una de esas caer peleando… si es que alguien lo lograba asesinar, seria olvidado rápidamente, aquella idea pesimista y oscura empezó a echar raíces extrañamente animándolo, después de todo, nadie lo estaba esperando, en ningún sitio, y con su típica sonrisa animosa y alegre de siempre se acerco a varios pasos de Boden, después de que todas aquellas bestias poco civilizadas empezaran a andar, mas que para decirle algo para ver si el tenia algo que decirle, su cabeza palpitaba, en especial su mandíbula, parecía que la influencia de la luna que no estaba presente hacia mella en el tanto como si estuviera a punto de ser luna llena.

-Boden… espero que te ayude con lo que pueda, y si es que muero en todo esto, te estaré agradecido

Al ver al chico caminando hacia el la cara de Boden cambio: nadie podia darse cuenta si era real o solo un chiste macabro de los suyos, pero sonrio tiernamente y se acerco al chico, poniendo la mano libre sobre su cabeza acariciandola. - Pense que te quedarias en las ruinas hasta que todo terminara...vaya que eres desobediente Dimitri - suspiro pero sin dejar de sonrier mientras se agachaba un poco para ver bien al chico - bueno...ya que estas aqui vendras conmigo - miro a la mujer de vestido negro y al chico con armadura - ustedes...no me fio aun de ustedes pero tambien vendran - aparto la mano de la cabeza de Dimitri y solto un fuerte silbido que resono en todo el valle; acto seguido, aparecieron en el cielo 3 seres alados: dos eran gargolas grises, con sus orejas puntiagudas y sus ojos que parecian carbones encendidos...la otra era un pequeño dragon totalmente de hueso, sin carne ni piel, que aterrizo al lado de Dimitri y comenzo a frotar su craneo contra su ropa muy suavemente; las gargolas se limitaron a posarse frente a los otros dos, gruñiendo como si estuvieran decepcionadas de ser meras monturas.

ustedes...no me fio aun de ustedes pero tambien vendran - vaya eso dolio en mi ego femenino...
-siento mucho lo que usted dice mi lord, pero le aseguro que una mujer es mucho mas confiable que un hombre- el niño y el chico que acaba de llegar me ven con resentimiento -pero mi señor, le ofresco mi hogar, para que planee todo ahi... por que si sale ahora seria un peligro para usted y para ellos- les ofresco el hogar de mi casi difunto esposo (?), y no por que quiera tener a esos chicos en mi hogar, pero seria bueno tenerlos vigilados, al igual que mi señor que no confia en mi, yo no confio en ellos.

Hice una mueca aludiendo a una sonrisa luego de escuchar a la chica -creo que esos comentarios son ridículos... seamos hombres o mujeres esto es la guerra, y aquí todos valemos por igual... esa clase de palabras lisonjeras podrían traernos una destrucción indeseable- me subí a la gárgola que al parecer detestaba mantenerme encima de ella, pero luego de unos momentos logré dominar -como usted dijo mi señor Lord Boden, un caballero de la muerte... a su disposición, sirviendo a la voluntad que sea lo suficientemente poderosa como para irrumpir en las fuerzas de la Academia e infundirnos las fuerzas en batalla-

A pesar del peso de la armadura de placas que traigo encima, ajusta bien a las necesidades para las que me he preparado -creo que este cuerpo es el ideal después de todo, solamente accese a esa preciosa fuente de poder eólica podré hacer frente total a lo que se me ponga enfrente...-

Miro con algo de rareza aquel dragón hecho puramente de huesos, sin embargo parecía que emanaba un calor desde dentro de estos, suponía que era magia, o algo más poderoso que lo mantenía unido y latente, con vida. Acaricio ese cráneo que se restregaba cariñoso en su ropa, su mano sintió ese extraño calor que emanaba y siguió sonriendo amable como siempre, mirando interesado las gárgolas de los otros muchachos que ahora ellos montaban, así que miro fijamente aquellas cuencas casi vacías, para que el dragón, bajando la cabeza le diese el permiso de montarlo, cosa que hizo sin problemas, sin embargo, le resultaba mas cómodo con su cola afuera, para el equilibrio, así que la saco, escuchando atentamente las palabras de los otros muchachos, Esa mujer era de verdad siniestra, no parecía tener conciencia mas allá de servir a Boden, eso no le agradaba, las personas deberían pensar un poco por si mismas, arrugo la nariz ante esas palabras, para luego escuchar al chico de la armadura de placas que parecía extremadamente pesada, definitivamente el no era el, eso se sentía, pero no le dio importancia, su instinto le decía muchas cosas referentes a el, mas ninguna de la cual preocuparse en ese instante. Así que sonriendo como siempre, con esa felicidad que destilaba de sus poros dijo

-Bueno, solo espero que la traición no sea parte de ninguno de sus planes, no quisiera tener que mostrar mi lado más malo, o al menos no aun

Boden observo a todos los presentes alli...su ejercito lentamente crecia, estaba consiguiendo tenientes a su mando, gente que compartia su sed de venganza...sin embargo, no podia esperarlos a todos. - Acepto tu oferta milady - le dijo a Euridice haciendole una muy pequeña reverencia...luego se planto de cara a la entrada de las ruinas y grito con todas sus fuerzas.

- FUERZAS DE LA OSCURIDAD! - sono una voz siniestra que a todos les puso los pelos de punta - LA MARCHA HA COMENZADO! TODOS AQUELLOS QUE NO QUIERAN MORIR Y DESEEN COMPARTIR EL NUEVO MUNDO QUE CREARE, VAYAN A LA ALDEA MONDPHASE, ALLI LOS ESPERARE! - terminado el mensaje, monto a Radium, a lo que los demas respondieron el gesto montando tambien - guiame - le dijo a Euridice, que levanto vuelo mientras el resto le seguia, observando bajo sus pies, interminable, la marea de muertos que lentamente avanzaba...avanzaba hacia un destino sin conocer.

(sigue aqui https://academiaradiumalba.foroactivo.com.es/t386-el-plan-profano-es-revelado-solo-aliados-a-boden#7604)