La llegada del estudiante del mar (libre)

En una noche de luna llena, en la tranquila oscuridad iluminada por la luz lunar, se oye el constante baile de las olas a la orilla de la playa. Las aguas tranquilas, sin ningun tipo de perturvacion...hasta que se oyen en la soledad el ruido de una gran aleta chapoteando su camino a tierra.

De las azules aguas, una figura larga y estilizada, mitad humana mitad pez, asiende de las profundidades. En su pecho empapado se nota un simple bolso de tela, cerrado por una perla pequeña y autentica.

El joven tritón, se abre paso de las olas, con toda la fuerza de sus brazos, a una roca alta alejada del agua. Cuando logra colocar su mitad superior a salvo, usa sus brazos para sacar de la marea su larga y hermosa cola.

???: uf...asi que este es el continente Akull? Es la primera vez que vengo a la superficie..espero poder encontrar la persona que mi padre me dijo...*mira la luna* Padre tambien me recomendo dormir alejado del agua para que mi ola se secara *se recuesta de la roca* como es mi primera vez transformando mi cola a piernas, consumira toda la energia que reuna al dormir...buenas noches...*cierra los ojos y se duerme*


Al día siguiente, en la misma roca, un joven niño de 10 años, bañado por la calidez del sol matutino, dormia en posicion fetal para mantener el calor que su pequeño cuerpo desnudo producia, abrazando sus pequeñas piernas cubiertas de algunas escamas.

Zale: zzzzzzzz~

Riokotsu había salido a entrenar un poco esa mañana, con sus poderes de fuego. Aurig siempre andaba entrenando y cada vez notaba que se hacía más fuerte, y él quería hacer lo mismo. Decidido, camino hasta la playa, donde intentaría combatir agua con fuego. Caminó durante casi una hora; no recordaba que la playa estuviera tan alejada de la Academia...

Se alegró enormemente al llegar así, la suave brisa marina rozándole la cara. Inspiró aire, sonriendo; adoraba aquella sensación de libertad que le producía el mar. Se sentó en la arena, mirando el agua, con el pelo revolviéndose en su cabeza por el viento.

Movió la cabeza de un lado a otro, hasta que, a lo lejos, en una roca, vislumbró lo que parecía una figura humana. Extrañado, se acercó a él, pestañeando. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, descubrió que era un niño pequeño, con unas orejas francamente raras. El pequeño ninja se asustó un poco, pero al ver que dormía, se tranquilizó y alargó una mano para tocarle un brazo, susurrando.

-Oye... ¿estás despierto?

Zale: mmmm~ un ratito mas madre~...

El pequeño sireno, ahora casi humano, abrio uno de sus grandes ojos grises y mira al chico desconocido. De improvisto, debido a la sorpresa, sus orejas-aletas se levantan y con ellas una cantidad considerable de agua que embiste a Riokotsu en pleno pecho.

Zale: WAH! perdon! *sentandose en la roca* a-aun no logro controlar bien mi hidrokinesis!! Esta bien!?

Rio sintió la fuerte presión del agua sobre su pecho, sorprendiéndose y haciendo que el cuerpo se le fuera para atrás, alejándose de él. Lo miró, parpadeando ante tal espectáculo. Nunca se había imaginado que un niño tan pequeño tuviera aquellos poderes y los pudiera usar con tanta fuerza. Se forzó a sonreirle, no porque no quisiera, sino por el dolor que sentía en el pecho.

-Vaya... no pasa nada pequeño -dijo, una mano en el pecho- No te preocupes, estoy bien... solo estoy algo impresionado, no me esperaba para nada eso. -se sinceró, caminando lentamente hacia él.

Zale se impresiono de que no lo haya regañado por la embestida accidental y tambien porque lo llamo pequeño, aun teniendo el 16 años. Sel levanta, con su bolso enfrente de el, sin darse cuanta aun que esta totalmente desnudo.

Zale: *lo mira* estoy buscando a alguien llamado Scott Schiebinger. Eres tu Scott Schiebinger? *lo señala*

Algo en la mañana le había dicho a Scott que se fuera a asomar a la costa, algo desconocido, una voz que recordaba pero que quería creer que no le hablaba sino simplemente la soñaba. "Aproxímate a la playa que Zale te espera, cuida de el" decía aquella voz repetitivamente.

-Ugh... pero que problema, siempre esos sueños raros desde que volví a la normalidad- decía mientras caminaba en dirección a la costa, aún cuando el alba apenas bañaba con luz aquella mañana -necesito dormir mas seguido que me estoy fatigando, tal vez un cafesito no me haga daño...-

No tardó mucho en llegar de donde se había quedado a dormir a aquel lugar, creyendo que eran patrañas y que simplemente su mente le había jugado una mala racha -¡Odio esos malditos sueños! ¡debo de estar volviéndome loco! ¿será que Samael aún sigue ahí dentro como espina el maldito?- frunció el ceño con desagrado.

-Estoy buscando a alguien llamado Scott Schiebinger ¿eres tu Scott Schiebinger?- escuchó una voz a lo lejos a pesar del rompimiento de las olas con las rocas cercanas -¿uh? ¿Zale? ...¿qué rayos haría el aquí? si mis tiempos de jugar al pirata ya pasaron- miró hacia el mar intentando divisarlo, y luego volteo a la costa, mirando a un niño de ojos grises, sin ropa y recostado sobre la roca con un sujeto con vestimenta ligera -Zale... ¿¡qué!?- abre los ojos ampliamente corriendo pesadamente, pues la armadura y sobretodo el adormecimiento de la mañana no le permiten correr con total soltura, aproximándose a ellos -dijiste... ¿Scott Schiebinger?-

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Nota: de como conoció a Scott ahora el es mucho mas alto. Medía alrededor de 1.71 mts cuando se conocieron pero debido a acontecimientos respectivos a dentro del rol de ARA, Scott actualmente mide 2.01 mts... lo sé, es enorme

El pequeño sireno, ignorando a Riokutsu, voltea la cabeza y mira al hombre enorme que se acerca.

- 8U....!!....Los de la superficie son asi de enormes!? un poco mas grande y pareceria un kraken!-

-dijiste... ¿Scott Schiebinger?- digo el enorme extraño

- Si, esa es la persona que mi padre dijo que me ayudaria cuando llegara a la superficie- le dice el pequeño Marin girandose por completo con su bolso cubriendole

(oh, come on, no digas eso! Zale quiere conocer gente!)

e e Franky me matará... pero igual tengo que... tengo que...))

El peliverde caminaba por la playa, divagando, cuando divisó dos siluetas a lo lejos. Tal vez... alguien conocido... ¿alguien por conocer? Reconoció a uno de ellos, descrito mil veces por los gemelos Giorgatos. - Esto... podría ser dificil... - Se dijo a si mismo, viendo a ambos, ya cerca. - Buen día... ¿está todo bien? Tu eres estudiante de la Academia.. - Dijo viendo a Scott. - ¿Te está molestando? - Dirigió la mirada al niño, arqueando una ceja. - Disculpa si así es...

-Molestando?-dice Zale al hombre alado que llego a la playa-No señor, si es quien creo que es, el es mi guia! 8D

El joven pelirrojo escuchó una voz a su espalda. Cuando se giró para ver quién era, descubrió a un chico altísimo de pelo platino. Se sobresaltó un poco, pues no esperaba encontrar alguien como él en aquel lugar. Después, pudo observar como el pequeño niño, desnudo, se acercaba hasta él.

Parpadeó, parecía que aquel extraño era al que estaba buscando el pequeño peliazul. Se acercó un poco a ellos, simplemente por curiosidad. Al cabo de unos minutos, vio acercarse a un ángel hasta ellos. Era increíble, jamás había visto aquellas criaturas en su vida, y allí, en esa Academia, había podido conocer ya razas de todo tipo. Era todo una sorpresa después de otra. No separó sus ojos del gran ángel que se acercaba a ellos, simplemente le emocionaba y entusiasmaba ver aquellas criaturas tan de cerca.

El marin recien llegado a tierra, aun desnudo pues olvido de la emocion el cubrirse, empezo a estornudar debido a la brisa marina en su piel.

Al escuchar cómo estornudaba aquel pequeño niño, lo miró, torciendo la boca al ver que estaba desnudo y seguramente se resfriaría. Cogió la camiseta que tenía y se la quitó, acercándose al pequeña para ponérsela.

-Será mejor que te pongas algo o te resfriarás -dijo, con una sonrisa en los labios.

-Oh, gracias. La ropa que traje esta aun mojada- dijo Zale aceptando la camiseta y poniendosela. Le qudaalgo larga y holgada -Tengo que ponerla a secar tambien