Pescando...

una mañana frìa en los alrededores de ARA,una mañana en que las nubes flojeaban por el cielo,movièndose a veces lento y a veces ràpido,grises.Era la tìpica mañana que a cualquiera se le congelaban las manos.Pero eso nole importaba al enèrgico Enda,quièn iba poco menos que trotando,dejando que el viento helado chocara contra su cara y le descolorara los labios a un color morado.Con una cañade pescar a cuestas se dirigìa hacia el lago,en busca de revivir una actividad pasada.

Temblando de frìo,pero con una sonrisa càlida,buscò un lugar alrededor del lago para instalarse còmodamente,encontrò ese lugar debajo de un àrbol,a pesar de que no hiciera calor,prefiriò debajo del àrbol,tomando su caña de pescar y haciendo unos ùltimosajustes a èsta,lanzò finalmente la carnada al agua comenzando su larga espera hasta que un pez se animara a caer en la trampa.

Era una actividadque realizaban èl y su maestro del pasado,todas las mañanas de invierno iban a pescar (si es que no habìa hielo),o era resignarse a comer verduras sin ningùn tipo de carne acompañàndolas,recordaba las mañanas frìas o lluviosas en lasque comìan pescado y vegetales,despuès de una batalla por pescar algùn ser acuàtico,y escuchar en la ventana como caìan los granizos,y ver el fuego al lado derecha de la mesa,que secaba las ropas mojadas,un ambiente confortable,pero pasado,ahora Enda sòlo tenìa su habitaciòn,ningùn tipo de casa pequeña pero acojedora.

Al recordar eso,èl no se percatò de la làgrima que se deslizaba por su mejilla,hasta que notò que algo caliente bajaba desde su ojo,se secò la làgrima ràpidamente,esperando que la razòn sea felicidad y no nostalgia....