Provocando una caida ( privado Dimitri-Blau)

Una pequeña figura se iba asimilando a la distancia volando de manera sigilosa y rápida de color azul, evitando cualquier contacto con los demonios y criaturas oscuras y en poco tiempo se alejo de la cúpula del pueblo, elevándose rápidamente de la tierra quedando cerca de aquellas nubes oscuras que daban un toque bastante tétrico a la batalla.

La pequeña figura de la joven que no era más que el dragón azul de Medea, su familiar con forma humana quedo flotando en medio del aire visualizando la Academia Radium Alba - Ahora solamente debo informarle a la academia la situación de Mondphase... - Musito en un tono de voz preocupado mientras llevaba sus manos a su pecho volviendo su mirada al pueblo con una expresión bastante triste, después de todo aquella dragoncita nunca amo las peleas sino todo lo contrario y el simple hecho de que estuvieran sus seres queridos en peligro lo hacían aun peor - Evan... Medea... Todos... -

Un ligero aroma a sangre llego a Blau, lo que hizo que instintivamente mirara a todos lados, lo que menos queria era encontrarse con un enemigo completamente sola y aun menos usar sus habilidades para lastimar a alguien.

De la peor manera Blau descubrió de donde provenía aquel olor a sangre - ¡Ah! - Blau soltó un corto grito al sentir como el lobo clavaba sus garras en sus hombros, su vestido blanco se teñía de carmesí, sintiendo algo de frio en la herida que se formaba - ¡Suéltame! - Grito la dragoncita empujando bruscamente al lobo mientras sus garras desgarraban parte de su ropa abriendo más las heridas en sus hombros a separarse de esa manera. Blau se llevo las manos a los hombros temblando un poco ante el dolor ¿Como se suponía que un lobo había caído del cielo? ¿Y porque su aroma se le hacía familiar?

Blau no era el tipo de dragón que estuviera acostumbrado a sentir dolor o participar en peleas, llevaba bastante tiempo en paz sin haber participado en un pelea en sus 3 cortos años de vida y esta sería la primera vez que alguien la lastimara "Este olor... La sangre hace que no pueda diferenciarlo..." Pensó para sus adentro mientras sujetaba con fuerza sus hombros pero no tenía tiempo suficiente para pensar en el dolor, aquel lobo había vuelto esta vez sobre un dragón esqueletito y no dudo ni tardo ni un momento en atacarla nuevamente.

Una llamarada fue directamente hacia ella y no tuvo más remedio que apartar sus manos de sus hombros ensangrentados, con sus manos manchadas de sangre aun cerró los ojos y estas brillaron con un tono azul, un circulo mágico se dibujo al instante formando lo que parecía un escudo de hielo que se evaporó junto al fuego al entrar en contacto, claramente esto no seria fácil - No quiero atacarte - Dijo la dragoncita volviendo a llevar sus manos al hombros, rápidamente moviendo sus alas comenzó a adentrarse entre los árboles, allí el dragón tendría dificultad con su vuelo mientras ella tenía la ventaja de ser pequeña.

La dragoncita hubiese deseado que aquel lobo la hubiese dejado en paz al adentrarse entre los árboles, pero lamentablemente la guerra es guerra y los enemigos no tendrían piedad; de nuevo fue atacada por el dragón esquelético, esta vez por fuego negro que hizo que las copas de los arboles quedaran quemados, tal cual como el bosque negro. Antes de que ese ataque llegara a ella uso un carcho de agua para hacer un rápido e improvisado escudo que la protegió de las quemaduras que hubiese provocado en ataque, aunque para su mala suerte al evaporarse este escucho, de la nada, aquel lobo volvió a atacarla, pero estas vez dañando sus alas - ¡Déjame en paz! - Grito Blau llevando sus manos a su espalda como pudo sujetando al lobo por sus patas arrojándolo contra un árbol.

Intentaba mover sus alas para volar pero era inútil, no se movían por más que quisiera y el dolor que sentía se intensificaba, claramente Blau se negaba a dañarlo por más que fuera su enemigo pero debía llegar lo antes posible a la academia - Lo siento... - Dijo mientras colocaba sus manos en el suelo, rápidamente hielo cubrió al lobo hasta el cuello pero antes de llegar a cubrirlo totalmente reconoció su aroma - ¿Dimi...tri...? - Musito confundida haciendo que el hielo que rodeaba al lobo se debilitará.

Blau no tuvo si quiera tiempo de reaccionar, había quedado completamente desconsentida al ver que de hecho, era Dimitri quien la había estado atacando todo el rato - ¿Porque?... - Musito con los ojos vidriosos pero Dimitri aprovecho su debilidad y rápidamente la dejo en el suelo, no entendía en qué situación se encontraba ¿Dimitri la mataría? Blau cerró los ojos apretando un poco sus puños, en ese momento la decepción que sentía era mil veces más fuerte que el dolor que sentía de sus heridas.

Sin siquiera decir una palabra, tres estalactitas de hielo se formaron en el suelo, sin darle tiempo a Dimitri de reaccionar si quiera estas se clavaron en su espalda, pierna y pecho tiñéndose de rojo pero al estar ella cerca de Dimitri una de las estalactitas paso cerca de su pecho, por su hombro derecho, podía sentir el frio del hielo y la sangre congelándose lentamente mientras escurría hasta el suelo "No me peudo mover asi..." Penso ignorando todo dolor.

Blau no podía creer lo que sucedía, simplemente podía mirar con aquella estalactita de hielo se manchaba por su propia sangre, era doloroso, cierto, pero llegado a un punto el dolor era lo que menos le importaba ya que lo único que deseaba era que Dimitri se marchará de allí por lo que por más que quisiera debía lastimarlo para que se quedara quieto - No podre entenderlo... No quiero hacerlo... - Musito mientras movía un poco sus pierna al sentir como una de las garras del licántropo rasguñaba su piernas dibujando un extraño símbolo, una maldición quizás, pues sintió como sus poderes disminuían drásticamente, se sentía completamente indefensa e inútil, no podía más que sentirse asqueada de sí misma.

Al sentir la mano de Dimitri pasar por su rostro, de manera algo brusca movió su cabeza a un lado, no queria que la tocará - ... - Miro al lobo comenzar a marcharse pero como pudo se levanto temblorosa haciendo que la estalactita saliera por el mismo lugar donde entro, el dolor era insoportable, casi podía probar en sus labios el sabor metálico de la sangre - No te dejaré ir así... Por todos... No puedo... - Musito mientras usaba su fuerza para arrancar la estalactita del suelo y clavarla en la espalda de Dimitri con toda la fuerza que podía usar en ese momento.

- !!! - Blau abrió los ojos de par en par al sentir como la estalactita perforaba su pecho, de sus labios no salía voz alguna aunque sintiera que perdía en conocimiento cada vez que esta se adentraba en su pecho hasta que se profundizara más en su cuerpo y por más que queria reprimir el dolor esta vez no pudo hacerlo, las fuerzas no le daban para más y un hilo de sangre corrió por la comisura de sus labios, su vestido blanco se había teñido de rojo y sus manos cayeron a ambos lados de su cuerpo entrecerrando un poco los ojos.

Su vista se volvía nublosa - ¿Po... ue... Llo... r... as?... - logro musitar al mismo tiempo que comenzaba a llorar también sin entender porque no la terminaba, sin entender porque su amigo hacia eso, traicionada, decepcionada, así se sentía con Dimitri.

Al recostarla al suelo no pudo hacer nada, se limito a quejarse de dolor mientras este le quitaba la estalactita y cerraba su herida como pudo, el dolor era agonizante para ella - N... lastim... es... a... Ev... - Blau había caído desmazalada por el dolor, no pudo si quiera terminar de hablar, no podía más que dejar ir a Dimitri.