Almuerzo a medio día 2

Me senté en una mesa y vi la ensalada que me había preparado Clío. - Hmm... - Clío preparaba para dos personas antes: Alvestam y yo. ¿Por qué habían tres recipientes? Moví la cabeza. - Tal vez... esta vez se preparó algo. - Sonreí mientras asentía y comenzaba a comer.

(( Post semi-privado entre Evan y Helio (?)))

((Posteo aquí porque me dijiste por msn, Helio XD))

Me acerqué nuevamente a la mesa de Helio, otra vez viéndolo almorzar como hacía días que se suscitó aquella pelea, al verme acercarme me puso una mirada penetrante -tranquilo Helio, no vengo a pelear ni a provocar conflictos estúpidos, hay cosas que lo explotaron ese día y ahora no tengo ningún motivo para ello, a menos que fuera el dinero... pero por dinero no te mataría, suena ridículo. Me alegro de que Clio me prepare ensalada igual que a ti, es taaaaan deliciosa~... algún día le pediré que me enseñe a prepararla-

Helio prefirió poner atención a su ensalada en ese momento, así que comprendí y pausé un poco mi habla. Un par de minutos después noté un tercer plato en la mesa...

-Oye... ¿y ese plato de quién es? ¿Clio te dejó doble ración, o me la dejó a mi... o nos la dividimos?- cuestioné con curiosidad.

Solté una risita. - Tranquilo, te devolveré el dinero en la primera oportunidad que tenga. - Miré el otro plato. - No lo sé... supuse que era de Clío... - Gruñí al pensar que ella le preparaba comida a alguien más, sino me agradaba la idea de que le cocinara a Alvestam... ¡menos que le cocinara a alguien más! - ¡Más vale que sea para una profesora! - Grité mientras daba un golpe en la mesa mirando el plato.

Evan se acercó haciendo la típica danza de ballet que utilizaba para ir a pedirle a Clio que le cocinara algo. Su rostro brillaba como madera recién lustrada.

-Oh- se sorprendió. Clio no estaba por allí, pero una caja de almuerzo de las que ella siempre utilizaba se encontraba allí, con la ensalada que él le había pedido el día anterior. No tuvo que pensar mucho para darse cuenta de que le había dejado el almuerzo preparado. -Ho~~~~ ♥ Clio-san es la mejor~~ T^T ♥♥♥♥ - se emocionó, mientras tomaba la caja de almuerzo en sus manos y se disponía a buscar una mesa.

Miré de reojo al castaño. - Sí... tenía que ser otro profesor. - Mastiqué un poco de la ensalada mientras lo veía. - ¿Quién es, eh? - Miré de reojo a Alvestam. - ¡Oye, aquí hay un lugar vacío! - Grité mientras señalaba una silla frente a mi.

Evan dirigió la mirada hacia el que le había ofrecido un lugar. Se veía muy parecido a Clio, pero era hombre y los colores de su cabello y ojos eran exactamente opuestos.

-Gracias~ - sonrió, mientras se sentaba en la mesa. Observó al otro chico que acompañaba al que le había hablado y luego devolvió la mirada al primero. -Creo que no nos conocemos, soy Evan, profesor de Arte de la Academia - dijo extendiendo una de sus manos.

-Mucho gusto... Evan, le vi en... algún lugar de la escuela y tiene una ardua labor por delante, debe ser una materia muy absorbente. Yo soy el profesor Kris Alvestam, ocupado de la materia de crianza de familiares- entrecerraba los ojos recordando donde había visto su nombre plasmado, creo que fue en los horarios -Me alegro de que se encuentre en la academia ¿qué lo trae por aquí?-

Procuré dirigirme al profesor con el mayor respeto posible, después de todo no le conocía y aunque su actitud se me hacía ciertamente extraña y patética, por ser una persona desconocida para mi le debía todo el respeto posible.

Gruñí. - Sí, sí.. yo soy el profesor de Jardinería, Helio Giorgatos. - Miré el plato que traía en manos y vi de nuevo a Kris. ¿Era al único que le molestaba ese plato? No, Kris debía sentirse igual. Si me había costado tanto aceptar que Clío le preparara el almuerzo a su novio... ¿quién era este tipo? Lo miré fijamente... Evan... me había dicho algo de él... me puse a recordar mientras mordía el tenedor.

-Mucho gusto... Evan, le vi en... algún lugar de la escuela y tiene una ardua labor por delante, debe ser una materia muy absorbente. Yo soy el profesor Kris Alvestam, ocupado de la materia de crianza de familiares-

Una pequeña gota de sudor bajó por la mejilla de Evan. Así que aquel profesor se encargaba de la materia de crianza de familiares... seguramente si conociera su historia, no podría evitar reirse a carcajadas.
Luego de unos segundos de silencio respondió.

-Ah, encantado... - dijo, desviando un poco la mirada. Luego recordó ese nombre - Oh, Kris! Entonces tú eres el novio de Clio-san! Ho~ qué afortunado~ - sonrió galantemente.

- Yo soy el profesor de Jardinería, Helio Giorgatos. -

El tipo que era identico a Clio se había presentado. Si no recordaba mal, compartía el mismo apellido que ella... Y había escuchado nombrar a un tal Helio más de una vez por parte de la ninfa.

-Helio! Entonces tu eres... el hermano de Clio-san? ♥ - sonrió. - Son idénticos o.o -
Evan notó que Helio era bastante serio. Se preguntó si siempre sería así o si había tenido un mal día en particular.

-Me alegro de que se encuentre en la academia ¿qué lo trae por aquí?- preguntó Kris.

Evan se acomodó mejor en su asiento, preparándose para probar su primer bocado - Todos los días paso por aqui, pero hoy he venido un poco más tarde que de costumbre ^^ - dijo - Clio-san siempre me prepara el almuerzo *3*~ ♥ - probó un poco de ensalada, con cara de felicidad.

El ambiente se tensaba, no era Evan sino Helio quien miraba de fea manera a aquel sujeto... en verdad se notaba su molestia.

- Oh, Kris! Entonces tú eres el novio de Clio-san! Ho~ qué afortunado~ - escuché decir a Evan mientras buscaba disfrutar los jitomates del platillo que me había preparado, y lo hacía pero no contesté porque traía la boca llena.

La burdeza con la que abordaba Helio al profesor Evan hizo aún más tenso el ambiente de la plática, ya empezaba a marearme un ligero dolor de cabeza por causa de ello -gracias Evan, es increíble ser novio de la mejor cocinera del mundo y... sep, Helio es idéntico pero solo en apariencia a Clio jejejeje-

Agregué buscando acomodar a Helio en calma ya que andaba mordiendo su tenedor -oye, ultimamente Clio prepara el almuerzo a muchas personas pues es aficionada a la cocina y le gusta que prueben de lo que hace. Tu tranqui, estamos conociendonos entre todos y que bueno que Clio se haga fama de acuerdo a su buena cocina-

Fulminé a Kris con la mirada. - ¿Eso crees? - Miré fijamente a Evan. - Definitivamente... no te daré la mano de mi hermana, Alvestam... - Sonreí. - Sí... somos... gemelos. - Volví a morder el cubierto. Oh.. sí... Evan, lo comenzaba a recordar. Sonreí. - ¡Ya! Phyro me habló de ti... tu eras el escandaloso que no me dejaba dormir... Clío decía que eras una buena persona, aunque un tanto ingenuo. - Volví a morder el cubierto mientras lo veía. Si fuese así, Phyro no estaría tan molesto con él...

-gracias Evan, es increíble ser novio de la mejor cocinera del mundo y... sep, Helio es idéntico pero solo en apariencia a Clio jejejeje-

-¿Sólo en apariencia?- observó a Helio. Creía que entendía a qué se refería Kris. Sólo con echarle un vistazo se notaba la diferencia de personalidades. -Ah, es cierto. Clio-san es más bonita ♥ - dijo

Helio habló, por alguna razón se veía molesto, o como si se estuviera conteniendo por algo. - ¡Ya! Phyro me habló de ti... tu eras el escandaloso que no me dejaba dormir... Clío decía que eras una buena persona, aunque un tanto ingenuo. -

Evan abrió un poco más los ojos para formar una mirada curiosa. -Oh~ el pajarraco te habló de mi? ♥ Sabía que le caía bien después de todo, hahaha! - hizo una pausa - Oh, sobre aquel incidente... ya pasó, ya pasó! El pasado, pisado! Hahaha - se llevó una buena porción de ensalada a la boca, feliz como una perdiz, y librándose de pedir las disculpas correspondientes.

Me acerqué a Helio y le dije despacio -Tranquilo, es un poco desesperante pero si tomamos las acciones adecuadas puede que se vaya, se calle o... al menos le conozcamos un poco ¿no crees?- aunque la reacción de el parecía ser únicamente la clásica "mordida de cuchara".

Ya dirigiéndome a Evan -Pues... yo no discuto quien es mas bonito, si Helio o Clio, eso queda muy a su criterio ya que la belleza es subjetiva, aún por encima de los estereotipos- tomé otro bocado de mi ensalada mientras veía que Helio se molestaba más y más... parecía que iba a explotar no solo conmigo sino principalmente contra Evan.

" ¿Es en serio? ¿Por qué Clío sigue insistiendo en estar con tipos como este?" Miré a Evan y a Kris. Sonreí mientras veía la cuchara. - Si, claro... le caíste de maravilla. Se burló todo el día de cómo te veías con el cabello quemado. - Sonreí mientras colocaba mis manos en la cabeza con los dedos indices al frente, simulando los cuernos. - Pero bueno... ya lo pasado, pisado - Comí un poco más de la ensalada mientras me recargaba en la silla.

Evan observó a Kris con una mirada aguda, como estudiándolo. -Me caes bien, orejón. - dijo. - Pareces una persona centrada y con criterio propio. Un poco serio, tal vez, pero sin caer en lo amargo ¬w¬ - y al decir lo último dirigió casualmente la mirada hacia el profesor de jardinería.

-Y en cuanto al pajarraco... la próxima vez que se meta con mi cabello le haré limpiar el piso del salón de arte con sus plumas =3= - se atrevió a decir. Aunque sólo después se dio cuenta de que eso podría no caerle muy bien al querubín. Sin embargo, no le dio mucha importancia, y siguió comiendo con una sonrisa de oreja a oreja. - Ah~~ Clio-san es la mejor ♥♥♥ ¿en dónde habrá aprendido a cocinar tan bien? -


((si si si XDD, que suene el Aleluya!! Izu contestó!!! XDDDDDDDD Ahora pueden vengarse y tardar el doble de lo que tardé yo =v=Uu))

Noté la mirada de Evan estudiándome y escuché su veredicto, después de todo no era un profesor afeminado... o al menos lo noté en su tono de respuesta -¿amargo? ¡oh! no mire a Helio de esa manera, el es un...- puse a buscar entre mi lista de adjetivos para definir correctamente a Helio -¡amargo! oh... tiene razón profesor Evan- bajé la mirada con decepción al no encontrar el adjetivo adecuado para Helio.

Escuché también lo de Phyro. No se me hacía novedad que el familiar de Helio hiciera desmanes por doquier, pues encarna la naturaleza traviesa y curiosa de Helio, una faceta de la vida que el querubín siempre quiso vivir pero por miedo no lo hizo -Descuide profesor Evan, el familiar de Helio suele ser así pero no lo hace con alevosía porque no es malo, sino con curiosidad. No aplaudo sus acciones pero hay que saber como corregirle...- Me llevé una mano a los labios tallándolos en reacción de pensamiento, después miré a Helio quien parecía molestarse por las palabras de Evan. Estaba a punto de romper la cuchara a mordidas por lo que intervine buscando calmar el ambiente que generaba la molestia del hermano de Clío -Mejor avísele a Helio o sino a mi, y ya decidiremos un castigo adecuado que le haga recordar lo que no debe hacer, o de menos una llamada de atención-

Viendo que hice algo que pudo calmar todo empecé a disfrutar la ensalada y dejando que continuara hablando el profesor de arte, poco antes de terminar el plato que comía añadí -Clío aprendió a cocinar en mi casa, cuando vivía en las montañas boscosas del noreste había muchas hierbas y frutos diferentes en la zona, entonces la curiosidad por verme cocinar cuando les encontré a Helio y a Clío despertó en ella y... veo que le gustó mucho ¡o al menos sus ensaladas lo reflejan!- terminé mi ensalada y añadí nuevamente -Debería de aprender cocina, profesor Evan. Clío cocina aquí en la Academia pero cuando usted no tenga a Clío cerca apreciará el saber cocinar, y recordará además a Clío por haberle enseñado ¡es útil! ¡a mi me funcionó aprender de los elfos con los que vivía y posteriormente aprender de la sazón de ella cuando adquirió experiencia!-

Arqueé una ceja viendo a Evan. ¿Qué Phyro iba a qué? Retuve una risa, moviendo la cabeza. - Claro... ¡oye, Alvestam! No digas eso, tu y yo sabemos que jamás fui así... - Desvié la mirada, sin poder evitar recordar cuando vivimos con Kris. " Blah, blah, blah" Veía como los labios del elfo se movían sin articular palabras interesantes. - Hazme el favor... ¡Clío no es tu cocinera! - Moví la mano comiendo un poco más y viendo a Evan. - Y la tuya menos... ¡aunque la idea del orejón es buena! Aprende a cocinar...

Evan escuchó atentamente la historia de Kris sobre cómo Clio había aprendido a cocinar. Le resultó interesante conocer algo de su pasado, y no pudo evitar sonreír imaginando a una Clio más joven entusiasmada, viendo a Kris cocinar y deseando aprender.
Escuchó que el profesor de jardinería volvió a quejarse. -Oh, no es que no sepa cocinar... He tenido que aprender a hacerlo cuando empecé a vivir con mi maestro - comió el último bocado de la ensalada, y al terminar, cruzó los cubiertos sobre el plato y apoyó la cara sobre la palma de su mano. - El viejo me obligaba a cocinar todos los días... por eso siento que estar aquí es una bendición ¬w¬ - dijo, recordando sus días de casi amo de casa. - Sin embargo, mis comidas nunca se compararían a las de Clio san ♥ Ella lo hace todo con verdadero amor, y yo lo hacía por obligación - sonrió.
Tomó un poco de agua, observando el bonito día que se veía a través de la ventana. Las nubes corrían rápido, al parecer había bastante viento. -Entonces... ¿Cómo es eso de que tú los encontraste, orejón? - preguntó, devolviendo la vista a Kris y refiriéndose a los hermanos Giorgatos.

-Bueno...- dirigí una mirada molesta a Helio -Clío evidentemente no es mi cocinera, no es necesario que me lo recuerdes... pero la tuya tampoco, y eso por si acaso se te ocurría encasillar tu mente a que por ser tu hermana es tu cocinera- cambié mi mueca por una sonrisa sin cambiar la mirada.

Escuché todo lo que mencionó Evan acerca de su maestro y respondí su pregunta -Es una larga historia, pero resumiré en que salí de cacería con Terracanis por la noche y vi a ambos entre un arbusto tirados en la nieve. Los recogí y les di posada esperando a que despertaran, y lo hicieron... de ahí y por varios años más les di posada hasta que ellos decidieron irse- me recliné hacia atrás recordando con nostalgia.